El domingo 25 de Septiembre en el Rte. El Zagal de San Martin nos
visitaban los Dustaphonics, apenas eran las 10 de la noche y la banda liderada
por Yvan Serrano y como Lead Vocal
Hayley Red atraían al publico al escenario.
Empezaron a descargar sus sonidos primitivos Hayley con su saber
hacer encima del escenario se metió al publico desde su primera sacudida de
cadera y melena. El concierto avanza y el público empieza disfrutar a lo
grande. Los ritmos Groove, Soul, o Boogaloo, todo con aromas vintage que me recuerdan
a Bo Didley, Link Wray, a veces a Barrence y como no también a los Ramones. Una
mezcla y agitación que hace que no tengas ganas de que el show termine, bailes
y agites tus caderas en un ritmo infernal.
Sonaron temas de sus Lp’s anteriores y nos presentaron su ultimo
disco “Johnny and Bo", recuerdo temas como Big Smoke London Town, Rocking
Boogaloo, Johnny and Bo, Tura Santana Tribute Song, Party Girl, etc. Así se
sucedían los temas sin pausa uno tras otro creo que fueron unos 20 temas los
que tocaron en directo, el tiempo paso volando.
Su Música primitiva de baile con tres acordes básicos pero
poderosos hacia que el público estuviese entregado con la banda, en una
conexión de felicidad que un concierto
de rock and Roll en la linea de los Dustaphonics consigue de manera especial.
Hubo que parar unos minutos porque Yvan se quedo sin alguna cuerda
en la guitarra y algún problema con la correa de su guitarra, pensé que aquello
haría que el público perdiese la conexión con la banda, pero no fue así, con un
público mas entregado aun, llego el momento de los vises. Hayley nos decía que
un solo tema y la cama, pero el publico con el grito unísono de “Otra tres,
Otras Tres” convenció a la banda y nos entregaron cuatro temas.
Yo fui feliz, disfrute mucho, pero el público que estaba a mi
alrededor tenían una inmensa sonrisa de felicidad mientras disfrutaban del
concierto y al final esas sonrisas no se borraron de nadie de los allí
presentes.
También destacar el ambiente que se vive en el Zagal de San Martin,
es algo único, es como una pequeña gran familia que crece a cada semana y como
es de ley, agradecer a Johnny Descargando y al Rte. El Zagal de San Martin por
hacer posible que cada semana haya un pequeño paraíso.
Para terminar y resumir repetiré lo que casi todo el mundo allí
decía “ ¡Que Bolo!!! ¡Que Bolo!!”
